Fiesta Ante Huancayo, Examen Real Ante Alianza
Se ganó con jerarquía, y por momentos vimos al Cristal que todos queremos ver: un equipo intenso, sólido y letal. Pero si el objetivo es realmente ganar el Clausura, no basta con golear a rivales de media tabla. La verdadera medida de un candidato está en vencer a sus rivales directos.
El 5-0 frente a Huancayo deja buenas sensaciones: contundencia ofensiva, presión alta y un dominio casi total del juego. Fue un partido para disfrutar desde la tribuna y recuperar confianza, pero también para recordar que esto es solo una parte del camino. Porque el verdadero termómetro llegará este martes, cuando Cristal enfrente a Alianza Lima, un rival directo por el título.
Hoy, Lutiger perdió varios duelos individuales y volvió a mostrar problemas en salida que, ante un rival más exigente, pueden costar caro. La defensa sintió la ausencia de Araujo y el ingreso de Pósito, que si bien cumplió, evidenció que la línea de fondo pierde solidez y orden sin su central titular.
Irven Ávila, por su parte, sigue demostrando voluntad, pero la sensación es clara: ya no le alcanza para sostener el ritmo que exige un torneo donde cada partido puede definir el campeonato. Cristal necesita más frescura, más velocidad y más punch en ataque para encarar a defensas como la de Alianza, que no dará tantas facilidades.
El desafío es mayúsculo: mantener la idea ofensiva que enamora, pero blindar la retaguardia y elegir bien las piezas. Porque los goles de hoy alimentan la ilusión, pero las dudas defensivas y el bajo rendimiento de algunos referentes en partidos grandes pueden transformarse en fantasmas el martes.
El examen real está a la vuelta de la esquina. Y allí no bastará con proponer; será necesario competir, corregir errores y demostrar que Cristal puede ser letal sin descuidar su propia área.